Capítulo 586
Después de que se marcharon, en la sala solo quedaron Federico, Eva, André y Thiago.
Federico fue el primero en romper el silencio.
-André, ¿le pediste a mi hermana que te ayudara a invitar a Estela Valdés como invitada especial… para Araceli Vargas?
André asintió con calma.
-Sí.
El gesto de Federico se endureció de inmediato.
-Antes no sabías cómo era la relación entre nosotros y Sabrina, así que viniste a pedirnos ayuda. No te lo tomé en cuenta.
Pero ahora que ya conoces bien nuestra relación, mejor ni lo menciones otra vez.
Por una amante, ¿esperas que vayamos a dejar mal a nuestra propia hermana? Nosotros no haríamos jamás algo así.
Eva, al escuchar esto, miró a André con sorpresa.
-Señor Carvalho, ¿entonces la persona que convenció a Estela para ser invitada especial… fue Sabrina?
André no lo negó.
-Perdón. En ese momento no sabía cuál era su relación. Pensé que no se conocían, así que nunca mencioné el asunto.
Eva reflexionó un instante y se dio cuenta de que tenía sentido.
Asintió despacio.
-Fue un malentendido, eso sí… -pausó un momento. Pero mi hermano tiene razón. Si te ayudáramos con esto, sería como traicionar a Sabrina.
Así que… disculpame, si alguna vez necesitas algo distinto, ven a buscarme sin problema.
Tampoco es que Eva estuviera tan desesperada por quedar bien con André como para pelearse con su hermana por un simple favor.
No era ingenua, y menos cuando se trataba de la familia.
André guardó silencio unos segundos antes de contestar.
-Entre Araceli y yo, las cosas no son como la gente dice. Sí, estuvimos juntos, pero desde el día en que me casé con Sabrina, nunca más pensé en volver con Araceli.
Ella está enferma, y le debo mucho. Por eso, en este último tramo de su vida, quiero ayudarla a cumplir sus deseos.
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Su voz era tranquila, sin titubeos. Su cara, serena y sin rastro de vergüenza.
-Te lo puedo asegurar: desde que me casé, no he tenido nada con otra persona. Lo que hay entre Araceli y yo es transparente.
Federico se relajó al escuchar esa explicación. Su expresión ya no era tan dura.
-De cualquier modo, su separación también tuvo que ver con Araceli. Espero que puedas mantener distancia con ella.
André asintió.
-Cuando termine su concierto, dejaré todo saldado… No volveré a ayudarla.
Federico, que era un tipo agudo, captó de inmediato el matiz escondido en las palabras de
André.
Se le dibujó una sonrisa entre burlona y seria.
-André, Sabrina no es tu plan B.
Y con el carácter que tiene, dudo mucho que quiera volver contigo.
Sabrina ni siquiera quiere regresar a la familia Ramos, ¿cómo va a perdonarte tan fácil?
André, sin perder la calma, respondió:
-Eso solo se sabrá con el tiempo.
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