Capítulo 611
Eva Ramos aún no había dicho nada cuando Rocío Hoyos, con una sonrisa, se adelantó a hablar.
-¿Se acuerdan cuando todos bromeaban diciendo que Nicolás Rangel era el prometido de Eva, y luego Sabrina Ibáñez terminó metiéndose a la cama con Nicolás? -Rocío hizo una pausa, mirando a todos con picardía-. Ahora, como si fuera poco, va y sale con Fidel, y resulta que hasta un escándalo de acoso armaron.
Se encogió de hombros, como si todo fuera un chisme más de sobremesa,
-La verdad, si Fidel no se casa con Sabrina después de esto, yo no sé qué va a pasar -remató, soltando una carcajada.
Eva miró directamente a Fidel Castaño.
-Fidel, Sabrina no es tan mala como piensas. Hernán Castaño la respalda y además organizó esta cita entre ustedes, seguro que la tiene en buena estima.
Se detuvo un momento antes de agregar:
-A decir verdad, Sabrina también tiene muchas cualidades.
Apenas terminó de hablar, Nicolás soltó un bufido despectivo.
-¿Cualidades? ¿De verdad? Una muchacha que creció en el campo y que, quién sabe cómo, terminó entrando al Conservatorio de Música Santa Victoria… ¿qué cualidades puede tener? Eva, solo fíjate con quiénes se junta ahora. Se nota que le gusta trepar, su ambición es enorme.
Rocío abrió los ojos, sorprendida.
-¿Sabrina se graduó del A?
Nicolás soltó una mueca.
-Quién sabe, seguro fue pura suerte que la aceptaran.
Eva reviró, sin perder la calma.
-Para entrar al Conservatorio de Música Santa Victoria no basta con tener suerte.
Nicolás la miró y soltó un suspiro, como si le diera lástima.
-Eva, tú la ves como a una hermana, pero ella nunca te ha visto igual…
No terminó de decirlo porque Eva lo interrumpió con suavidad.
-Ya, mejor no hablemos de eso,
Eva no quería caer en hablar mal de Sabrina a sus espaldas. Suspiró y aclaró:
-Mira, aunque Sabrina y yo no seamos muy cercanas, tampoco somos enemigas. Guste o no, somos familia y eso no va a cambiar.
Dudó un instante, luego miró a Fidel.
-Fidel, podrías intentar conocer a Sabrina, en vez de rechazarla de entrada….
Fidella corto, su mirada intensa clavada en el rostro de Eva.
-io me interesa conocer a nadie más que a ti.
Eva se quedó helada, sin palabras por un instante
Nicolás y Rocio intercambiaron una mirada cómplice, y acto seguido, ambos fingieron mirar hacia otro lado, como si no
quisieran meterse
-Fidel -dijo Eva, mirándolo con seriedad, para mi solo eres como un hermano.
No era la primera vez que Eva se lo decla. Nunca sintió nada romántico por él y, en cuanto noté que Fidel tenía sentimientos por ella, lo rechazó de la forma más suave posible. Al final, tuvo que decirselo sin rodeos.
A pesar de todo, Fidel seguía actuand
Capítulo 611
-Lo sé.
Lo decía, pero en el fondo, no parecía dispuesto a rendirse.
Viéndolo así, Rocío prefirió cambiar de tema.
-Eva, mira la pintura de allá al frente, ¿es la que querías ver?
La pregunta de Rocío captó de inmediato la atención de los tres.
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