Capítulo 219
Fabián todavía intentaba escuchar más cuando André se giró repentinamente y lo descubrió apostado a escasa distancia, con el cuerpo rígido y la mirada indiscreta fija en la conversación ajena.
-Fabián, ¿qué estás haciendo aquí?
La piel de Fabián era tan gruesa que no experimentó el más mínimo remordimiento por haber sido sorprendido espiando. Esbozó una sonrisa despreocupada mientras se acercaba con paso desenvuelto.
-Me enteré que ya encontraron a Thiago, por eso Araceli y yo vinimos al hospital a verlo.
Al notar que Fabián se aproximaba, Sabrina interrumpió abruptamente su conversación con André y adoptó una expresión hermética.
-Me voy primero, no se te olvide lo que prometiste. Y mañana a las diez, no faltes.
Sabrina ni siquiera dirigió una mirada a Fabián cuando pasó a su lado, dándose media vuelta para marcharse con paso decidido por el pasillo del hospital. Fabián arrugó los labios en un gesto de desdén manifiesto antes de volverse hacia André con curiosidad mal disimulada.
-André, ¿a dónde van mañana?
El rostro de André permaneció impasible, su expresión revelando tan poco como una máscara tallada en madera oscura.
-No preguntes lo que no te corresponde.
Fabián se aproximó con una sonrisa maliciosa dibujándose lentamente en sus labios.
-¿No me digas que van a tener una cita?
“¿Una cita?” André se detuvo en seco, mientras sus ojos oscuros adquirían una profundidad insondable. Era imposible que Sabrina realmente quisiera divorciarse de él; de lo contrario, jamás habría alentado a Thiago a montar semejante escándalo con su desaparición. Tal vez, como insinuaba Fabián, ella solo estaba utilizando el pretexto del divorcio como una estratagema para atraer su atención.
Al observar que André no respondía, Fabián interpretó su silencio como confirmación y dejó escapar un resoplido burlón.
-Mira, qué rápido mostró sus verdaderas intenciones. Ya lo decía yo, ¿cómo iba a querer divorciarse de ti? Solo es una táctica para llamar tu atención. Si no me equivoco, seguro inventó algún pretexto para verte mañana, ¿verdad? Primero fingió estar enferma, luego simuló un secuestro, ¿y todavía no se cansa de esos trucos tan obvios? André, ¡no dejes que te manipule!
André guardó silencio, pero sus ojos oscuros se habían convertido en pozos insondables donde resultaba imposible leer sus pensamientos. En el pasado, habría despreciado las supuestas
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Capitulo 21
tácticas de Sabrina tal como señalaba Fabián. Sin embargo, últimamente aquella otra faceta de su esposa había despertado en él un interés inusitado. Sabrina no era tan aburrida y sosa como siempre había creído, y ahora sentía una extraña curiosidad por descubrir quién era realmente esta mujer con quien había compartido tantos años.
“Ir a la cita… no sería mala idea“, reflexionó André, genuinamente intrigado por descubrir cómo Sabrina había planeado el encuentro del día siguiente y qué estrategia emplearía para intentar una reconciliación. Desde que ella se había mudado, finalmente comprendió lo extremadamente difícil que resultaba cuidar de un niño en solitario. Debía admitir que Sabrina había asumido muchas responsabilidades familiares por él durante años. Si realmente reconocía sus errores, quizás podría darle una oportunidad por el bienestar de Thiago.
Fabián, notando que André no reaccionaba con su habitual desdén hacia su esposa, experimentó un desasosiego creciente. El silencio de André equivalía prácticamente a una confesión: ¡realmente planeaba encontrarse con Sabrina! No podía permitir que esa mujer se saliera con la suya tan fácilmente. Continuó lanzando críticas mordaces contra Sabrina mientras caminaban, pero André mantuvo un silencio pétreo hasta que llegaron a la puerta de la habitación del hospital donde Thiago los esperaba.
-Fabián, sin importar qué pase, Sabrina sigue siendo la madre de Thiago. En el futuro, no digas
estas cosas frente a él.
Fabián se detuvo abruptamente, sorprendido por la firmeza inusual en el tono de André, quien
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